En este texto de Platón, se trata el
tema del amor, mediante el cual diferentes invitados de un banquete
dan su opinión sobre éste, haciendo así del relato un diálogo en
el cual los diferentes interlocutores se van complementando a lo
largo de la conversación.
He estado de acuerdo con todo lo
relatado, pero voy a una de las oraciones que más han captado mi
atención, que dice así: El amor es el dios que más favorece a
los hombres.
El amor nos hace
mejores personas. No sólo el amor hacia un enamorado, sino a
familiares, amigos... ese sentimiento de afecto que un ser humano
tiene hacia otro. Un elemento para crecer feliz es con amor y cariño.
Cuando estamos tristes, las personas más cercanas nos ayudan,
intentándonos animar, para vernos esbozar una sonrisa. Sería muy
difícil imaginar una vida sin ningún tipo de sentimientos, porque,
aunque todos éstos no sean positivos, como por ejemplo el dolor o la
tristeza, tampoco obtendríamos los buenos, como el amor o la
felicidad... En cada momento del día, estamos dominados por algún
tipo de sentimiento. ¿Sería realmente vivir sin sentir, o
simplemente no estar muerto?
Aunque, si tuviese
que elegir el mejor razonamiento de qué es el amor, optaría por las
palabras de Agatón, gran poeta y hábil retórico, que es quien
completa más la definición de un sentimiento casi inexplicable. Me
gusta su argumento porque dota al amor de una naturaleza divina y que
reside en el alma del hombre, y en tanto que divino, se introduce en
todas partes y penetra en el interior de los corazones. Por esta
razón el amor es bello, por ello éste siempre está en guerra con
la fealdad, entendiendo una fealdad no física, sino del alma,
porque si lo que se siente no es hermoso, no es amor.